En una nueva prueba insólita en Japón, La Pulga demostró toda su habilidad en un juego de precisión. Participaron muchos jugadores, entre ellos el legendario Zidane, pero Messi fue el mejor de todos.
Hace unos días, apareció un video donde se podía ver al mejor jugador del mundo compitiendo con un arquero robot. La Pulga se tomó muy personal el duelo y terminó festejando la victoria ante la máquina como si fuese la final del mundo.
En un nuevo desafió insólito, típico de Japón, el delantero de la Selección Argentina tenía que pegarle con el balón a 9 cuadrados que se encontraban ubicados en el arco. Solo tenía 12 oportunidades para derribar todos.
El desafío fue muy apasionante y La Pulga demostró, una vez más, porque es el mejor.
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